ZEUS, rey del Olimpo era un salido y como tal se fijo en Europa, se prendó de ella, bueno ya me entendéis, podríamos decir que se “exoneró su báculo”, pero Europa era un tanto estrecha, entonces aprovechando que le gustaba deambular entre los rebaños de su padre, no se le ocurrió otra cosa que convertirse en toro. Cuando ella vio tan magnifico ejemplar no pudo reprimir el deseo de acariciar las astas y las ancas de tan bello animal. Hecho que aprovecho Zeus, para raptarla y llevarla a Creta, hoy los tíos para follar lo más que pagan es un hotel de carretera, esto si que era estilo, pero claro era el dios de dioses.
En Cresta la poseyó y de ella desciende el Minotauro que tantos dolores de cabeza les dio a los cretenses, hasta que Teseo acabo con él. Los cretenses para celebrar el triunfo sobre Minos, llevaban a cabo la Taurokatapsia, algo así como los recortadores portugueses, saltaban por encima de la bestia, la recortaban a pocos centímetros, hasta que agotada esta caía y era sacrificada a los dioses.
Hoy los recortadores, versus políticos, son una especie de esquizofrénicos que adoptan a la vez la personalidad del toro, por lo que en lugar de sacrificarse por el dios, que en este caso sería el pueblo, le envisten previendo sus movimientos con inesperados recortes que siempre empitonan a los mas desvalidos, los más lentos o los más indefensos.
Amigos esto es romper las reglas, y Zeus nunca estaría de acuerdo, habrá que ponerse a ello y sacrificar a los políticos, aunque sea corriendo en las calles y recortando a sus cuadrillas, que han cambiado los capotes y banderillas por porras y balas de goma.
Veis como todo esta relacionado. Besos y buen fin de semana, sin comprar ni gastar, vamos a provocar la recesión, vamos a cansar al toro, antes de asestarle el rejón de muerte.
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