Nadie me lo ha contado, yo estuve allí, y éramos un millón, si 1.000.000, ni más ni menos. No obstante la pija de la delegada del gobierno, que para eso está, dice que 40.000, pero eso sería como decir que en el desfiladero de las Termópilas, no había 300 espartanos al mando de Leonidas o que los persas no eran dos millones contra ellos, o que Jenofonte no vino de Persia con 10.000 griegos recorriendo mares y desiertos.
La historia lo escribirá como siempre, con sangre. Dice el saber popular: que solo hay dos cosas en el mundo que son semejantes, la historia y la morcilla de mi pueblo, ambas hechas con sangre y ambas se repiten.
Y me temo que estos delegados, diputados, senadores, gobernadores, alcaldes y viceconsejeros, necesitan eso sangre, nada se mueve en la historia si no está hecho como la morcilla de mi pueblo con sangre, y siempre ambas terminan repitiéndose en el tiempo.
Harán falta, haremos falta unos cientos de desgraciados que se quedaran, que nos quedaremos en el camino antes de entrar en los palacios, antes de entrar en las instituciones publicas y prenderlas fuego. Ese es el único idioma que entienden, les hemos dado mucha cancha, pero ahora hasta la policía y el ejercito se les vuelven y cuando los perros no comen de la mano de su mano, se buscan otro.
Decía ayer, mi amigo Josito, que nada cambia, tiene razón pero evoluciona y la evolución lleva siempre con ella la selección, los que sobrevivan a este enfrentamiento serán más fuertes, mas conscientes y podrán recordar la memoria de los que cayeron en el camino, como yo recuerdo a los míos. Casi toda mi familia por parte de abuela fue fusilada en Toledo y yo los recuerdo aunque no los conocí, y mientras yo los recuerde estarán vivos y me temo que dentro de nada detrás de las barricadas conmigo.
Se están acabando las manifestaciones pacificas cuando a alguien le sacan de su casa por los Bancos, que a la vez reciben un dinero que debemos pagar todos, se esta acabando la paz cuando te pegan en la calle, se esta acabando la paz cuando te echan del trabajo, se esta acabando la paz cuando no tenemos educación, ni sanidad.
Al enemigo, ya lo decía Yan Shou, siempre hay que dejarle una salida honrosa, pero nos tienes cercados, con el robo, la mentira, la represión y la prepotencia, solo nos queda luchar. Si no me creéis, no tenéis nada más que esperar, la morcilla de mi pueblo no repite a los diez minutos, tiene que empezar la digestión para qué comience a recordarnos que la hemos comido, con la historia pasa lo mismo, siempre se repite.
Nos han engañado en unas elecciones donde se presentó un programa electoral que algunos descerebrados, bueno unos cuantos, bueno muchos, se creyeron, y mirad como estamos. Puede que todo sea lento, pero tendrán que irse, y si no se van por las buenas, a costa de sangre, sudor y lagrimas los echaremos.
LEVANTAROS Y GRITAR, LEVANTAROS Y LUCHAR, ES NUESTRA VIDA, ES NUESTRO FUTURO. MUERTE O VICTORIA.
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