Hay días que realmente te lo ponen a güevo, pero las facilidades no me han gustado nunca. Es inevitable comentar como el día de la Republica, el pasado 14 de Abril, como si fuese fruto de una Güija gigantesca, se reunierón en hospitales “privados”, lo cual por una parte es de agradecer, por lo de las listas de espera, que ellos no esperan, ellos hacen las listas.
Pero no nos engañemos que las facturas las pagamos todos, es lo que tiene la sanidad universal todos se acogen a ellas, pero en función del planeta de procedencia: entrevias o zarzuela, te atienden en satélites diferentes y con diferentes costes, pero todo sale del mismo banco central europeo, siempre con minúsculas. Si ese del que reciben nuestros bancos los dineros al 1% de interés, pero que luego se lo venden al estado al 5%, negocio redondo y al resto que nos den que bastante tenemos ya con pagar los intereses del estado, porque el estado somos todos.
Yo propongo que el nieto y el abuelo se compren una Wii, me parece que se escribe así, ya que el corrector no rechista, y se hagan una caza virtual, eso si de conejos, que al rey se le dan mejor tanto los de campo, como los de ciudad y así el nieto va aprendiendo dos disciplinas, disciplinas ambas que tanto caracterizan a los borbones, lastima que la hija de la penúltima coneja borbona sea gay, pero seguro que al Froilan le hace un algo y lo más que le va a pasar, va a ser que tenga un tirón muscular inguinal, vamos como los futbolistas.
Pero aquí, amigos y no tanto, el problema es la “prima de riesgo” y se de lo que hablo, yo tuve dos: una de procedencia andaluza que con 10 años escasos, me clavo sus atributos en el pecho y me enseñó como me debía comportar con ellos, mi abuela, versus, banco central europeo, estaba en el cuarto de al lado, yo mientras le di lo suyo y contra todo riesgo me hice con mi prima que me dejo los intereses a cero bajo cero.
Quedé tan a gusto y satisfecho que no volví a jugar en bolsa hasta un tiempo después. Cuando me vino otra "prima de riesgo", esta más peligrosa, ya que vino de alemania, donde mi tío se fue a busca trabajo por el paro en España, que ya se sabe franco, con minúsculas siempre, nunca tuvo paro porque los mando al extranjero, dentro de nada se le ocurrirá a Rajoy , tiempo al tiempo. Ella venia de un país avanzado, con una camiseta, que en virtud de dos ligeros tirantes tapaba unas tetas, en dos palabras impresionantes, “mis papas” me entregaron con 16 años a mi “prima de riesgo” y me mandaron al retiro, quizás fue la peor tarde de mi vida. Antes el retiro estaba lleno de chachas y soldados, pues los soldados olvidaron a las chachas y en cuestión de tres pasos en su recinto, sus inmensas y preciosas tetas se llenaron de ojos, mientras me interpelaban: ¡pero nene que vas a hacer tu con eso!, que, que iba yo hacer con eso, si me hubieran dejado maravillas tito, que me he criado en San Blas, pero no toco la flauta la prima de riesgo tenia 18 años y más vuelo que un tupolev rectificado, mientras que yo poco más sabia de un breve mete saca en el desposito de combustible, me quedé con las ganas. Pudo ser el mayor calentón de mi vida, termine con el cerebro, perdón con el escroto destrozado. Como ahora que la Merkel nos enseña las tetas, pero nos pide que nos cortemos los huevos si queremos tocarselas.
Por eso queridos amigos y el resto, yo se lo que una es una prima de riesgo, a la que todos quieren meter mano pero muy pocos pueden desflorar y terminan todos los que te rodean, en el cursus de la excitación, dandote por el culo.
Algún día lo leereis más estensamente en mis memorias si la demencia senil no me alcanza antes. Y si os encontrais a la prima de riesgo no lo dudeis follárosla, es menos doloroso y traumatimático que levantarse la tapa de un pie o caerse pedo en Bowtsbana. Y ya casi no nos quedan huevos, versus ovarios. Un beso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario