Este domingo seguramente será nuestra última oportunidad, allí donde nació la civilización, como hoy la entendemos, quienes entendemos de civilización, se va a producir el último combate en el que como hace cientos de años, los persas se enfrentaran a los griegos.
En el pasado los griegos consiguieron rechazarlos e hicieron que nuestra herencia sea la que es, en caso contrario hoy en día seriamos como Irán, Irak o Yemen, que no es un juicio de valor, es diferente. El individuo, en el sentido en que lo conocemos hoy, nació en ese momento. Vuelvo a repetir no es mejor ni peor que lo hoy conocemos, que la historia es así no hace juicio de valores, muestra hechos y consiguientes desarrollos.
Somos lo que somos merced de la muerte de miles de griegos tanto en Maratón como en las Térmopilas, como en Salamina. Son nuestros abuelos los que nos han hecho como somos. El domingo en Atenas será un día triste si como intentan los bancos los ciudadanos vuelvan a votar a la derecha para que les sigan recortando sueldos, pensiones, sanidad, ...........vida. Y es que se les va la vida a chorros, como se nos va a ir a nosotros, si acatamos las ordenes que en su día llegaron a Grecia y hoy llegan a nosotros: recortes en sueldos de empleados públicos. Pero alguien se puede creer que bajando el sueldo a empleados públicos cuyos salarios van de los 900 euros a los 1500 en un porcentaje del 90% de ellos, se va a arreglar esta crisis, creada por especuladores, banqueros y defraudadores? ¿Cuando dinero es eso?, yo os lo diré: nada, una cantidad tan irrisoria, que solo busca enmascarar los recortes en Sanidad, Educación, Investigación.
Vamos a perder una nueva generación, que la nuestra ya está perdida, nacerán investigadores, nacerán médicos, nacerán músicos, literatos, nacerán políticos conscientes, pero no podrán acceder a estudios, terminaran trabajando como peones, como reponedores, y en el mejor de los casos como eternos interinos con sueldos de 400 euros. Todo para que ellos sigan obstentando el poder, sus prevendas, sus castas políticas, los hijos de los hijos de los hijos. Es una vuelta a la Edad Media. Es como si los griegos no hubieran detenido al emperador Persa para ellos de origen divino.
Estamos en tiempos de Esperanza sin esperanza, ¿de verdad cree que sus cuentas amañadas desde los tiempos de Gallardón van a cuadrar, despidiendo interinos o en el mejor de los casos rebajándoles un 10% de su salario y jornada, para ajustar sus desmanes? Como ellos dicen en cifras "macroeconomicas" eso no es nada.
Quieren que todos seamos chinos, que tengamos los hijos que ellos dicen, que estudiemos los que ellos quieran, que vivan los que se lo puedan pagar y en suma una vuelta a un sistema democrático imperial, en el que se guardan las formas despeñandonos, el resto, en el fondo.
Hoy como ayer y seguramente mañana, todos seremos griegos, lo que pase en las llanuras de Maraton volverá a determinar el futuro de occidente y no son palabras rimbombantes, es una cruel realidad. ¿Tendrán que sucumbir miles todavía para que alguien sea consciente de que este no es el camino?
Si la izquierda gana en grecia, algo no muy probable, por el miedo que se ha ocupado el capital de infundir con amenazas de cierres de fronteras, corralitos, retención de los ahorros depositados en las oficina bancarias, convertidas hoy en cuevas de Ali-baba, pero sin códigos de honor.
Repito si la izquierda gana en Grecia se nos presenta una nueva alternativa, ¿mejor o peor?, solo un alternativa, otra forma de hacer las cosas. Ellos lo han intentado, los centros y la derechas y mirad como estamos.
Esperemos que sea una alternativa, que quizás a nosotros no nos de frutos pero siembre para las nuevas generaciones un futuro lejos de economía de mercado esclavista que en el fondo es lo que buscan.
Una nueva forma de hacer que debe tener la oportunidad de ver la luz.
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