Secuestrad@s: seres a los que se les priva de la libertad y se les obliga a realizar lo que sus captores, versus secuestradores, estiman oportuno.
Es una definición como otra cualquiera, seguro que la “real academia de la lengua”, (con minusculas, que con mayusculas ya se preocupan ellos de ponerla), tiene otra más rimbombante, pero esta me va bien para el corto del día y por supuesto se ajusta a la realidad, ¿qué a que realidad?, a la ficticia que vivimos, ¿a cual va a ser?
En "Cleaveland", Ohio, que viene a ser como “ojito” (imponer tono de advertencia), nos han despertado hoy con el secuestro por diez años de 3 jóvenes, cuando las secuestraron, claro, que ya son “treintañeras” y me ha dado por pensar, dada mi mente enferma, ¿en que me diferencio yo de ellas, en que te diferencias tu de ellas?
Ya se levantan gritos por el fondo, intentando contestar mi afirmación, pero lo bueno del blog es que nunca contesto a nadie, o casi nadie, ¿paqué?, que diría mi abuelo.
Me explico en cuanto se acallen los murmullos……………………. Me levanto por la mañana y según dicen tengo la suerte de tener un ¿trabajo?, ¡ojo!, la maldición bíblica, va por los del opus, se ha convertido en una suerte. Dios tiene que estar que trina, ya que un castigo, los hombres ……….de derechas, lo han convertido en una bendición.
Pues eso me levanto a las 6 de la mañana, versus A.M:, me encierro en una oficina realizando contestaciones a juzgados de lo social, que nunca son leídas, y que los jueces se pasan por los cojones, dictando sentencias en virtud de su próstata, de si se la ha comido su mujer o si el niño ha dejado embarazada a la novia, eso si sin sexismos, que si su señoría es mujer, sus preocupaciones serán otras, pero del mismo calado.
En eso pierdo el tiempo y por eso me pagan…………cada vez menos, tributando más, quitándome sueldo, pagas, vacaciones y aumentándome horario. Por lo tanto estoy secuestrado por mandato del poder. Alguno puede objetar que puedo dejar todo y dormir en un cajero automático, pero seguiré secuestrado, esta vez en la indigencia que provoca esta sociedad a quien “no entra por el aro”, (esta es de mi madre)
En suma estoy secuestrado y eso que se me podría considerar en libertad vigilada; no digo nada de los que tienen hijos, no tienen casa, trabajo, viven en pareja por qué no les queda más remedio y odian su vida por el caríz que ha tomado.
Todo ello bajo mandato de secuestro, secuestro de un poder político y económico, que elegimos siguiendo las directrices de los últimos y que hacen y deshacen con nosotros a su antojo.
Dicen que a las de "Cleaveland", las han violado y algunas han tenido hijas de sus violadores. Gallardón redacta una ley por la cual los embriones con malformaciones tendrán que nacer y secuestrar a sus padres, por si su secuestro político no fuera suficiente.
No protestamos ya que estamos secuestrados, por plazos, por hipotecas, por trabajos sumergidos, por capitales negros, que viajan a placer dirigiendo las economías de secuestro del resto de ciudadanos.
Tenemos secuestrados los cerebros, que ya no piensan en buscar vías, si no en no salirse de la via, si a esto unimos los embriones no viables, dentro de nada no habrá que seguir ni la via, tendrán que llevarnos de la mano, no sea que involuntariamente nos salgamos.
Al fin o al cabo las chicas de "Cleaveland", han podido llamar al teléfono de emergencias, ¿ a quién podemos llamar nosotros? Solo a nuestras conciencias, pero ¿Cuántas conciencias, no compradas, quedan en este gueto de la ignorancia y la codicia?
Mientras y otra vez mirándonos en EE UU, que tanto enseña, seguimos los pasos del FBI y como sucedió con “Al Capone”, nosotros lo más que llegaremos es a imputar “Al Borbón” por delito fiscal, pero claro Capone entro en Alcatraz, el Borbón no pagará ni multa, volverá al Palacio Real, también secuestrado, pero evidentemente con más comodidad.
Y es como dijo alguien, seguramente enajenado, las leyes son iguales para todos, como el secuestro ¿no?
No hay comentarios:
Publicar un comentario